Este es Patricio, un macaco de 12 años que vive en Moscú desde que su madre y familia fueron trasladados con el Circo Ruso como parte del show "Fantasía Mona". Patricio nunca se sintió muy conectado con este tipo de espectáculo y fue así como se asoció con Vladimir, un zapatero que vio arruinado su negocio con el bajo precio de los zapatos sintéticos y debió buscar nuevas alternativas.
Así, Patricio y Vladimir encantan a los turistas en la Plaza Roja. Patricio, se viste como un bebé, además de gesticular como tal, y Vladimir lo toma y apapacha como si fuera su hijo. De tanto suspiro de ternura hacen unos 500 rublos diarios.
Patricio cuenta desde su fantástica casa en el extranjero: " Es una delicia encantar a los niños y a veces gritarles un poco, para que no olviden que soy un macaco"
1 comentario:
Maravilloso y conmovedor!!!!
Pablito, pobre, me gustaría tener un hijo y un simio a la vez, pero no al mismo tiempo.
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